Desde los primeros minutos el Barcelona apeló a lo que mejor se le da, el fútbol de ataque. El asedio a la portería del Málaga se hizo patente desde los primeros minutos, y sólo la mala suerte y una defensa visitante bien posicionada pudo frenar al equipo, que a pesar de contar con bastantes ocasiones no consiguió materializarlas hasta los minutos finales de la primera parte. El gol llegó en un saque de esquina gracias a un remate de Gerard Piqué, pocos minutos después finalizaría la primera parte con 1-0 en el marcador.
El Barcelona empezó la segunda parte con mucha hambre de gol, y la recompensa tardó diez minutos en llegar. Tras una buena jugada colectiva, Messi pasó a Pedro, y el canario consiguió un chut con efecto ante el que ni la defensa ni el portero visitante pudo hacer nada, 2-0. El equipo siguió intentándolo sin parar, y tras una jugada parecida a la del segundo gol, Pedro pasó hacia Alexis y este remató al fondo de la red sin demasiadas complicaciones, 3-0 y el partido sentenciado.
El líneas generales fue un muy buen partido de los locales. No sólo consiguieron los tres puntos de una forma efectiva y solvente, si no que además, gracias a ella, se mantiene el liderato empatando a puntos con Atlético, y también la distancia de un punto con el Real Madrid. A destacar la tendencia positiva de este equipo, el cual da cada vez mayores muestras de solidez y también de adaptación a las nuevas ideas implantadas por el Tata Martino.
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